La tarde se asomaba tormentosa y las gotas de
la lluvia se estrellaban contra el ventanal formando pequeñas lagrimas que se
deslizaban hasta desaparecer, y en el inmenso salón que otrora brindaba
fastuosas fiestas hoy solo quedan migajas, sus paredes desgastadas falta de
pintura su oropel se ha perdido hace ya mucho tiempo, solo una silla y un viejo
piano es su decorado.
La policía esta sobre sus pasos el
enfrentamiento puede ser en cualquier momento, la espera se alarga ¿Quién es
ese hombre? De tez morena cabello crespo su edad nadie nunca la supo ojos
verdes al que todos lo llamaban el Mulato.
El humo del cigarrillo subiendo en espiral y
los efluvios del licor traen desde el ayer los recuerdos para poder conversar,
en el barrio del tambor donde al compás del parche de los morenos se mecen en
el candombe, un chiquillo de pantalones cortos tez morena y ojos verdes vivaces
corretea por sus calles
Para ganar algún dinero hace mandados y ayuda a
sus padres, fue en sus primeros tiempos mandadero de un caudillo de poca monta
al que llamaban el guapo Cicatrices, es entonces que el guapo vio en él un
chico vivaz y lo hizo su ladero, no sabía el jovencito que tomaba el camino
equivocado deslumbrado por dinero y poder.
En un ajuste de cuentas entre la policía y el
caudillo termina sin vida en un zanjón, en cuanto al Mulato lo llevan preso es
en ese momento que lo nombraron por su verdadero nombre se llamaba Manuel,
cuando salió de prisión comenzó su carrera delictiva pues había heredado los
negocios pocos transparentes de su mentor.
Fama dinero y poder lo encandilaron se olvidó
de sus orígenes se transformó en lo que en su tiempo fue poderoso, su brillo comenzó
a declinar que lo hizo enfrentar a todo rival que lo acosaba, un lobo solitario
que temía a su propia sombra lo encuentra solo en una habitación.
Sabe que está acorralado no sabe cuanto tiempo
le queda se escucha ruido de motores luego las sirenas son varias patrullas,
por altoparlantes les dicen Mulato
rendite estás rodeado. Se escuchan disparos una balacera infernal. Luego el
silencio se apodera de la escena todo terminó.
En una mesa de café este relato lo contaba
entre amigos uno de ellos cuando hace un amago de levantarse, otro que estaba
en la mesa dice pero Manuel no nos dijiste como finalizó todo, el hombre lo
miró sus ojos verdes se agrandaron y centellaron su tez morena en su mejilla
una cicatriz, cabello crespo se levantó se encogió de hombros y se fue sin
decir una palabra………
alejandrobojor@gmail.com ............ALEJANDRO CAPLAN