concierto de Aranjuez

lunes, 16 de septiembre de 2013

RETAZOS




Era una de esas tarde triste lluviosa y fría, que alguien con unos años encima le sugieren dos cosas, una de ellas es tomar unos mates con tortas fritas y mirar televisión o tratar de hacer una buena siesta, tal vez hacer las dos cosas a la vez y ver a través del ventanal caer la lluvia, oír el sonido de las gotas golpeando sobre la media sombra de plástico,  cayendo sobre el piso formando burbujas, momento melancólico, ¡¡que traviesa la magia de los recuerdos¡¡.


La magia se desvanece con la resonancia del teléfono, es que nos invitan a la casa de unos amigos de la familia para una cena a la que no podíamos rechazar, acudimos con la patrona sobremesa extendida y entretenida con  una buena conversación con nuestros amigos.

Ellos eran menores ella y él tendrían alrededor calculando a vista de buen cubero que no es mi fuerte unos cincuenta años, bastante diferencia nos separaban sin embargo congeniamos no sabría a ciencia cierta explicarlo pero ahí estábamos, frente a una mesa como comensales de lujo con nuestros anfitriones.

Tan enfrascados en la conversación que casi no oímos el sonido del timbre, el ¿Quién será? fue la respuesta al unísono de nuestros amigos, uno de ellos se dirige a la puerta de calle y coloca como puede un ojo en la mirilla del mismo, y observa a través y exclama es Dani y su novia. 

Nosotros no sabíamos quienes eran, y ellos no sabían que vinieran los hace pasar y nos presenta, es que los recién llegados son unos amigos todavía menores que ellos, así que allí estemos sentados casi tres generaciones con sus presentes y sus recuerdos en una gran y gratísima tertulia.

Me preguntaba como y de que pudiéramos hablar pero el correr del tiempo me hizo comprender que siempre hay un punto en común, del que se pude dialogar entre las tres generaciones ese es el presente, cada uno con su punto de vista los recuerdos diferentes según el cristal que se los mire.

Uno con más experiencia otros menos pero cada cual con lo suyo, sus sueños esperanzados que se hagan realidad el presente con su tecnología, apasionados con los videos juegos, la Play Station, los celulares la computadora, las tablet, que en nuestra época no la teníamos.

Pero siempre hay un pero exponiendo los juegos de mi generación, quedaron pensativos cuando les hablé del juego de las bolitas agachados frente a un árbol, en el cuadrado de sus límites de tierra con un hoyo en el medio y haciendo puntería con una de ellas sobre otras que se hallaban dentro, no se si lo entendieron pero querían saber más de esas épocas pasadas.

Retazos de una vida los recuerdos con sus magias me transportan atravesando los tiempos, las voces de amigos juegos de la infancia tratando de explicar cada uno de ellos, el juego del yo yo, los campeonatos de balero, ir  al parque a remontar barriletes los picados con una pelota de goma, cazar mariposas las que el smog las hizo desaparecer.

Eran tiempos que en el cine del barrio pasaban cine en continuado donde daban tres películas, por entonces no había televisión, cuando mi abuela hacía dulce de rosas, dulce de naranjas con las amargas no sé como la hacía pero ahora cuando la recuerdo hasta el perfume parece embriagarme

Ya más grande el estudio y otras obligaciones hacen diferente el escenario, comienzan los bailes entre amigos y amigas casi siempre en la casa de alguno de ellos que tenían terraza, las  chicas traían las viandas y los muchachos la bebida toda sin alcohol, siempre la atenta presencia de la madre o el padre del propietario de la terraza, el por si acaso alguno se pasara toda esa fiestita la llamábamos graciosamente Asalto.

Fragmentos y retazos de una vida contada en pocos minutos, quedan rondando los fantasmas y los duendes de ese pasado transcribirlos todos se hace imposible, los anfitriones tuvieron una visión de ese tiempo ya habrá en algún momento cuando los duendes me lo permitan proseguir este relato………


alejandrobojor@gmail .com..........ALEJANDRO CAPLAN.

No hay comentarios:

Publicar un comentario